miércoles, 7 de septiembre de 2011

LA ESPADA DE DIOS es la conjunción triple de Mercurio, Marte y Venus


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LA ESPADA DE DIOS es la conjunción triple de Mercurio, Marte y Venus cerca del Sol en Tauro.
Este acontecimiento astronómico sucedió por última vez hace 13.000 años cuando los textos antiguos relatan que tuvo lugar del diluvio universal.
Este evento fue profetizado por Nostradamus que da pistas en varias de sus cuartetas sobre la posición de los astros y que baticina el INICIO de algo, el PRINCIPIO de los EVENTOS, que astronómicamente concluirán con la Alineación Galáctica del 21 de diciembre de 2012 interpretada como el FIN de los ACONTECIMIENTOS.
(El Fin de los Tiempos del calendario Maya).
Según los textos de la antigüedad está alineación planetaria marca el “Comienzo del Juicio de Dios a los hombres”.
Es en este punto donde Nuestra posición frente a estos fenómenos pasados repercute en LOS ACONTECIMIENTOS VENIDEROS.
La Espada de Dios tiene que ser interpretada desde la libertad y la paz de la Conciencia Liberada (sin condicionamientos pasados, ni miedos, ni dudas, ni interferencias lógicas…)
Es en la meditación sobre este fenómeno transcendental donde la Maestría interior tiene que desplegar su verdadera Visión para que la “IMAGEN CONTEMPLADA” sea aquella que manifieste el devenir armónico del cambio dimensional.
Durante un tiempo hemos estado trabajando desde la profunda meditación sobre este trascendental momento astronómico, en los puntos etéricos que como muchos saben empezaron a manifestarse con la apertura de los portales 11-11 en 2008.
Desde la interacción que propició esta apertura con los reinos de dimensiones superiores son muchos Servidores e Iniciados quienes han estado cooperando con el delineamiento y la expansión energética y purificadora necesaria para que el CAMBIO venga propiciado por la energía superior (donde la naturaleza etérica y molécular fluyen sin fricción en perfecto acoplamiento vibracional).
Desde la Visión Total que nos han proporcionado los Templos astrales de la Nueva Tierra hacemos total incapié que el Devenir desde este instante de la consolidación de las energías en la matería, es un trabajo de Amor y Servicio que corresponde por entero a la Humanidad.
“La Espada de Dios” no es el Castigo de un Dios o una Fuente Divina de Amor…
Es la Visión Verdadera de la Ascensión que se manifestará sin las cadenas ya rotas del miedo y el bloqueo que mental que hemos padecido durante tanto tiempo.
Aquello en lo que decidamos creer respecto a este acontecimiento y a aquellos que quedan por venir hasta el completo ciclo de la Ascensión será “La Voluntad Divina que será manifestada”.
La Maestría Creadora Interior e Individual de cada uno de nosotros ha sido liberada para que “Rija su energía a Voluntad”.
Según la Tradición Inmemorial Transhimalayca las energías astrales son agua. Las emociones son la manifestación física de la Energía del Amor del Alma quien fluye en el mar Astral (Hijo).
En este Mar Astral se refleja el Mar de Fuego (Padre o Espíritu).
Para que el cambio dimensional se efectué en todos los órdenes y reinos de la tierra es necesario desarrollar plenamente la Nueva Visión.
Cuando seamos capaces de contemplar desde la No-Separatividad de las dimensiones superiores no tendrá cabida la posibilidad de “un juicio de Dios sobre la Humanidad”.
Con la certeza que la Divinidad es expresada y esperimentada en el Interior de cada ser, donde su chispa, el átomo permanente, no existe fuera si no dentro de cada ser humano, se disuelve la posibilidad de un cambio en fricción con catástrofes naturales y drama emocional para los hijos de Gaia.
Desde el nuevo desarrollo sensorial de la humanidad donde la polaridad deja de expresarse desde un extremo positivo u otro negativo no existe la posibilidad de juicio, ya que esta visión global convierte la oscuridad en simple ausencia de luz, arrancando el poder “imaginario” de una entidad o energía con movimiento o expansión independentiente.
La “ira de Dios” contemplanda desde la incomprensión de la densa mirada de los antiguos sumergida en el miedo, se transforma en estos tiempos de NUEVOS ACONTECIMIENTOS en el Amor que se posa sobre nuestro hombro para hacernos por fín, caballeros de las Cortes Celestiales Superiores.
Es la GRAN INICIACIÓN HUMANA.
El Diluvio Universal que derrama el Mar Astral (Emociones provinientes de la Pureza del Amor Absoluto del Alma que en nosotros mora), sobre la tierra, sus hijos y la materia, que se purifica y se hace más sutil.
Desde la Nueva forma sutil de los átomos la conducción de biofotones y quantas de luz cargados de sabiduría cósmica no encuentra fricción ni obstáculos para manifestarse e interactuar con el ADN humano, convirtiendo en ”comunicación” completa y plena los patrones del Universo que se manifestarán en la Nueva Vestidura de los Seres Humanos como entidades conscientes y participativas del Plan Universal.
Todo Fluye en armonía llenando sin esfuerzo el Nuevo Tiempo (EL ETERNO PRESENTE) y la Nueva Edad Dorada del Hombre donde el PLAN DE AMOR Y LUZ SE REALIZA.
NOTA: Debemos ser conscientes que la Nueva Visión debe ser desarrollada y expandida desde el CORAZÓN MEDIO.
Mediten sobre estas palabras desde lo más profundo de su Ser, y contemplen con amplitud toda muestra de esa Divinidad que se manifiesta desde los orígenes desde los Niveles Superiores de Conciencia.
Sólo esta Luz Interior, será la Guia de sus pasos en los cambios venideros.

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