lunes, 26 de marzo de 2012

Analizando los cambios del 2012



      Ya  está  pasando,   aunque  aún  no  hemos  juntado  todas  las  piezas  del "rompecabezas" para verlo, pero estamos en una "ola-espiral de cambio", como nunca  hemos  conocido y,  como en  todas  las  épocas de  cambio, somos  muy vulnerables.
       Experimentamos  con una nueva manera  de  percibir, entender,  aceptar e interpretar nuestra vida.  La ciencia y los científicos, han organizado el universo de una forma nueva y diferente:  ya  no  hay  separación  entre  los seres  humanos y el  universo,  la Tierra y la vida que la puebla, ni fractura entre espíritu y materia.
       Nos  ha   llevado  nuestro  tiempo  situar nuestra condición  como  seres humanos, en íntima conexión con la naturaleza,  en la que estamos insertos,  perdida  para la  mayoría, hace bastantes cientos de años y conservada aún,  por   algunas   tradiciones   indígenas. Según este "pensamiento cósmico", nuestra existencia, nuestra vida, sitúa en un paralelo de correlación, a la conciencia más pequeña, con   la   conciencia   más   grande:   nuestra "conciencia  más  profunda" es,  el pulso más tierno y delicado del "espíritu cósmico".

       En el pensamiento de los Mayas, el Agua, la Tierra, el Sol y el Aire, en todas sus posibles  manifestaciones,  son la  demostración  cotidiana y  ordinaria,  de  que "el cosmos" es un ser "vivo" y por lo tanto <sagrado>. 


 
   
       Universo y Tierra, Naturaleza y Ser Humano. Aquí está apoyado el "Calendario Maya": calendario que integra cuatro, en uno: el físico, el psíquico, el espiritual y el cósmico, en donde el tiempo es circular y cíclico. En estos momentos, estamos por terminar el ciclo de 5.125 años que empezó en el 3.113 A.C. y que -precisamente-, termina el 21 de Diciembre de este año 2012.
       Van Braam -ingeniero holandés-, encontró en Izabal (Guatemala, año 1864) una placa de jade grabada (21,6 cm de largo por 8 cm., de ancho): la "Placa de Leyden" (exhibida desde 1903, en el museo etnográfico de Holanda). En donde está representada una inscripción glífica, correspondiente a “la cuenta larga” de 5.125 años, (para nosotros, desde el 3.113 a.c. hasta el 21 de Dic del 2012 d.c.).
           
           
      En 1986, Maurice Cotterell (científico y matemático, fuera de toda “sospecha mística”), llevaba varios años barajando la idea de que el campo magnético del Sol, tenía su influencia y su consecuencia en la vida de la Tierra y estaba llevando adelante toda su revolucionaria teoría (revolucionaria para los científicos, se entiende) sobre "ciclos de la astrología y el Sol". En sus múltiples investigaciones, encontró el Códice de Dresde, desde donde venían a término, las mismas conclusiones que las suyas. Es decir: había encontrado un documento científico, (de la cultura Maya), que  basado en el conocimiento de nuestro sistema solar, confirmaba sus "sospechas”: la interrelación entre el Sistema Solar  y nosotros, los seres humanos.                     
                                                   
        Aquí, están contenidos múltiples estudios, acerca de como el Sol fluye e influye, no sólo en el ciclo de la vida, si no también en el movimiento de las sociedades, de los pueblos, del tiempo y las cosechas, ...por demás, en nuestra particular forma de ser. (El Códice de Dresde, ha sido utilizado por nuestra astronomía moderna para formalizar tablas muy específicas,  sobre múltiples fenómenos celestes, y detallados eclipses lunares).
                                                  

¿Cuál es el mensaje importante y trascendente que nos dejaron?

“Cuando el sistema solar esté otra vez a 180º de donde estaba hace 13.000 años, la estrella polar brille sobre el polo, la constelación de Acuario aparezca en el horizonte y el tránsito decimotercero de Venus se de –o sea: el 6 de junio del 2012-, el centro de la galaxia pulsará y habrá manifestaciones de fuego, agua, tierra y aire.



        Añaden además, específicamente, dos períodos: de 1992 a 2012 y de 2012 a 2032, en donde los cambios y las transformaciones, serán muchos y muy intensos.

       Según los estudiosos y expertos en el estudio de esta civilización, y más concretamente, de sus <escritos>, “la Profecía”, no es un mensaje de “fin del mundo”, simplemente es un anuncio: “este será un momento, un espacio de tiempo de gran aumento de energía en el planeta, momento de grandes cambios y grandes transformaciones”. Todo ello asistido por nuestra reacción, como seres humanos, ante todo este inmenso caudal energético:  

LA SOLUCIÓN QUE ELLOS PROPONEN: “CRECER EN CONCIENCIA Y ASUMIR NUESTRA RESPONSABILIDAD.
       
 
 NOS ADVIRTIERON:
-     La frecuencia vibratoria del planeta, se elevará (esta frecuencia, -que se mide con la “resonancia Shumann para los que lo quieran buscar-, pasó de 8 cíclos, a 13 ciclos).
-     Habrá cambios en todos los planetas del sistema solar (según los últimos estudios, los polos de Marte, han desaparecido en ¡un 60%! Y Venus tiene, casi el doble –es decir, dos veces más-, de irradiación luminosa y el resto de las estadísticas ¡da vértigo leerlas!).
-     Se intensificarán las tormentas solares (después de 300 años de “seguir al Sol”, en todos sus fenómenos, incluidas las tormentas solares, las más grandes y trascendentes, han ocurrido en estos 6 últimos meses).
-     Habrá aumentos en los movimientos sísmicos de la tierra. (Los terremotos y demás movimientos, han aumentado ¡un 425%!).
                                                           
-     Cambios en la temperatura del planeta. (Desde el año 1992, ha subido casi un grado, lo mismo que subimos ¡en los 100 años anteriores juntos!
-     Aumento de la “tensión eléctrica”. (Un promedio de 600 a 700 tormentas eléctricas en un mismo período de tiempo, era la “medida standard”, ahora, ¡vamos por las 2.000 simultáneas!)
-     Antes, promedio de rayos por segundo: unos 80, (hoy estamos entre los 180 y los 220).

       Desde los puntos de vista geofísico y solar, ¡todo está acelerado!, ¡nosotros también!. Nuestro cerebro, que emite igualmente sus propias “ondas”, está igualmente afectado, ¡como todo lo demás. 
         
Somos muchos los que, ya,  sentimos el tiempo más rápido.
Hay una “crisis de conciencia individual” generalizada.
- Estamos viviendo “eventos destino” (es decir: sucesos definitivos),       masivamente: sea en relaciones, sea en nuestros recursos, en nuestra salud, o en nuestra vida.
- Estamos en un “despertar de la conciencia”, global. 
- Las dos polaridades: bondad y maldad, están intensificadas y abiertos ambos caminos, el negativo y oscuro, de destrucción y guerra de hombre contra hombre, y el del crecimiento de la conciencia. (Incluyendo en ambos grupos, a todos los “listos” que hacen “lazos para tontos”, y a todos los “pescadores que pescan en los ríos revueltos”).
La “mente humana”, está ocupada resolviendo “el conflicto”.


        El 21 de Diciembre del 2012, el sol "nace" desde una "matríz celestial", será, cuando su órbita pase justo por el centro de la galaxia (la última vez que ocurrió, fue hace poco más de 25.000 años, atrás). Viéndolo desde nuestro planeta, La Tierra, Venus, el Sol y el centro de la galaxia, estarán alineados (es decir: en una misma "linea"). Aquí abajo les pongo este "poema astronómico”:

Posición del cielo, para el 21 de Diciembre del 2012 a las 10:17 a.m.
[21-12-2012.jpeg]
Guías: Via Látea, Eclíptica y Ecuador Galácticos.
Sobre la Ecliptica Venus, Pluto, el Sol (justo en el centro), Mercurio, Venus y Saturno.
¡QUE LO DISFRUTEN!    
  Atte. Mª Ysabel

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